Es una de las marcas de indumentaria más reconocidas y exitosas del país y Latinoamérica. Sus prendas son símbolo de calidad, exclusividad y
personalidad. La creadora de la marca, de igual nombre, hoy es una empresaria consagrada, referente de la explosión del diseño y la industria de
la moda en Argentina. Se destaca por el manejo personal y muy diferenciado del color y de los pequeños detalles que acompañan cada una de sus
prendas; Logrando así un estilo alegre, femenino y fresco.
Jazmín fue una de las primeras diseñadoras independientes contemporáneas con fuerte formación académica.
Desde sus primeros años, estuvo muy cerca del diseño, de las telas y de las pasarelas. La Clocharde, mítica boutique fundada por sus padres, Susy y
Leon Chebar, fue su primera gran escuela, hasta que, terminados sus estudios primarios y secundarios, Jazmín se trasladó a la ciudad de New York
donde ingresó a la Parsons School of Design, reconocida universidad especializada en el diseño de moda y textiles, obtenido su título en Fashion
Design y un posgrado en Fashion Merchandising en 1995.
La Ciudad le permitió estrenar sus primeras armas como profesional en los equipos de diseño de las afamadas firmas "Valentino" y "Donna
Karan". La experiencia allí le brindo la posibilidad de experimentar e hibridar la sofisticación y exclusividad tan europea que en la boutique de sus
padres había respirado, con la practicidad y la simpleza que los americanos le aportaron a la moda.
De regreso a Buenos Aires, se incorporó al equipo de diseño de "Vitamina", donde conoció al que luego sería su socio, Claudio Drescher,
exitoso empresario del rubro de la moda, fundador y director de esa compañía.
En marzo de 1997 su carrera toma un giro determinante al abrir su primer local en Buenos Aires. Era la época que hacían furor las marcas
minimalistas como "Vitamina", "Chocolate" y "Paula Cahen Danvers", de tonos neutros y siluetas ajustada y reveladoras; y ella irrumpió con
cueros de colores y detalles divertidos en prendas que proponían una feminidad holgada y etérea, llamando instantáneamente la atención de la
prensa, el público y de Claudio, quien también asistió al evento inaugural y quedo impactado por la explosión de colores que convivían en
armonía con la sencillez de los diseños de su ex empleada.
Así Jazmín Chebar se convirtió en una destacada exponente de esa generación del diseño de autor. En 1999, abrió su segundo local y
comienza, a la vez, a exportar a los Estados Unidos. En marzo de 2002, se asocia con Claudio Drescher y juntos prepararon un plan de
crecimiento y una estrategia para convertir a la marca en el símbolo de calidad, de exclusividad y personalidad.
En 7 meses abrieron locales en Paseo Alcorta, Palermo, Patio Bullrich y Unicenter, aprovechando la baja ocupación de los shoppings, y
posesionándose, estratégicamente en espacios de alto contacto con el público.
La estrategia que combina el buen diseño con cierta escala, ha constituido todo un desafío para el equipo de diseño, la producción y la logística de
Jazmín Chebar. En 6 años, la marca aumentó 20 veces su tamaño, profesionalizándose en cada una de las áreas creadas.
Hoy la empresa cuenta con 12 locales exclusivos en Buenos Aires, La Plata, Córdoba, Mendoza, como también en capitales del exterior: Chile,
Uruguay, México, Paraguay, Perú, Bolivia y otros .